Curiosidades que (tal vez) desconocías de ‘Star Wars: una nueva esperanza’
El 25 de mayo de 1977, de la mano de George Lucas, nació el universo de ‘Star Wars’ con el estreno de la que sería la primera película de una trilogía que hizo historia dentro del género de la ciencia ficción y del cine en general, y que, ya camino del nuevo siglo, se ha ido extendiendo hasta el infinito de la mano de Disney.
En ella, la princesa Leia (Carrie Fisher), líder del movimiento rebelde que desea reinstaurar la República, es capturada por las Fuerzas Imperiales capitaneadas por Darth Vader y serán el joven Luke Skywalker (Mark Hamill), Han Solo (Harrison Ford), y los androides R2D2 y C3PO, los encargados de rescatarla para volver a instaurar la justicia en el seno de la galaxia.
Aquella primera entrega de la saga se llamó precisamente así, ‘Star Wars’ (‘La guerra de las galaxias’), un título que cambiaría 20 años después por ‘Star Wars: Episodio IV - Una nueva esperanza’ (‘Star Wars: Episode IV - A New Hope’) en el momento en el que el universo creado por Lucas iba a comenzar a crecer con una nueva trilogía.
Su cambio de nombre podría etiquetarse como una de las curiosidades que rodean a esta película que ganó nada menos que 7 Oscar, de 11 nominaciones, un Globo de Oro, 11 Premios Saturn, 2 BAFTAS, un Grammy y un MTV Movie Awards. Pero hay muchas más que contaron desde Lucasfilm…
Precisamente, hablando de los Oscar, ‘Una nueva esperanza’ ha sido la única de todas las películas del universo ‘Star Wars’ que, aunque no se llevó la estatuilla, sí fue nominada a Mejor Película, además de ser el primer largometraje de ciencia ficción de la historia que se coló en la lista de candidatos para conseguirla.
En cuanto a su origen, la idea original de George Lucas era llevar a la gran pantalla las aventuras de uno de los grandes superhéroes de su infancia: Flash Gordon. Sin embargo, el productor italiano Dino de Laurentiis se le adelantó adquiriendo sus derechos y a Lucas no se le ocurrió una idea mejor que crear su propio universo de ciencia ficción.
Para crear ese nuevo universo, Lucas se inspiró en la mítica película de Akira Kuroasawa ‘La Fortaleza Escondida’ (‘Kakushi Toride no San-Akunin’, 1958) y en dos novelas fundamentales dentro del género de la ciencia ficción: ‘Dune’, de Frank Herbert, y ‘El señor de los anillos’ (‘The Lord of the Rings’), de J.R.R. Tolkien.
George Lucas escribió nada menos que nueve guiones distintos de ‘Star Wars’, de los que un ejecutivo de 20th Century Fox Alan Ladd Jr. solo accedió a producir uno. Fue el único estudio que aceptó el reto de Lucas, que traía a sus espaldas una larga lista de rechazos por considerar que sería un fracaso en una época en la que había poco interés por el cine de ciencia ficción.
En sus negociaciones con 20th Century Fox para poner en marcha la película, Lucas negoció una importante rebaja de su sueldo a cambio de quedarse con los derechos del ‘merchandising’ que generara la película. Una decisión muy acertada y que le supuso un importante sobresueldo…
Originalmente, el nombre de la película iba a ser ‘Adventures of Luke Starkiller, as taken from the journal of the whills, Saga I: The Star Wars’. Sin embargo, ya en el proceso de rodaje decidieron cambiarlo a ‘Star Wars’ y, por cierto, el nombre del protagonista a Luke Skywalker.
Además, el universo original que imaginó Lucas para ‘Star Wars’ era muy distinto al que luego llegó a nosotros: Luke era en realidad una chica; Solo, un alien de color verde, los wookies, como Chewbacca, se llamaban jawas; y C-3PO y R2-D2, podían haber sido C-3 y A-2.
Para el casting de la película, George Lucas tuvo la ayuda de un buen amigo, el también director y guionista de cine Brian De Palma, quien por aquel entonces andaba preparando la adaptación al cine de la película ‘Carrie’ (1976).
ADEMÁS: ¡Feliz día de Star Wars! Curiosidades de la saga y por qué se celebra
Por la audición para interpretar a la princesa Leia pasaron actrices como Amy Irving, Linda Purl, Cindy Williams, Jodie Foster o Sissy Spacek, entre otras, aunque a la pelea final por conseguirlo llegaron Terri Nunn y Carrie Fisher. La elegida fue Fisher, aunque para Lucas su favorita era Nunn, pero se encontraron con el problema de que, entonces, era menor de edad.
El detalle de que Brian de Palma estuviera preparando la adaptación de ‘Carrie’ también es importante para esta primera entrega de ‘Star Wars’, ya que Carrie Fisher iba a hacer en ella el papel protagonista, pero, al saber que saldría desnuda se echó a un lado dejando vía libre a Sissy Spacek, para, finalmente convertirse en Leia.
Carrie Fisher, por cierto, confesó años después que odiaba el peinado de la princesa Leia, algo que no se le ocurrió decir en ningún momento del rodaje por miedo a que George Lucas la despidiera.
En cuanto al personaje de Han Solo, contó con varios pretendientes -Kurt Russell, Robert Englund, Christophen Walken o Al Pacino, entre otros-, pero finalmente acabó en manos de un jovencísimo Harrison Ford, que había ido como apoyo a las pruebas de casting para ayudar a Lucas, con quien había trabajado en 1973 en la película ‘American Graffiti’.
Sorprendió también la elección para el personaje de Luke Skywalker de un prácticamente desconocido Mark Hamill, que acudió al casting después de que lo convenciera Robert Englund (a quien rechazaron para el papel de Han Solo) y que superó en la prueba a actores de la talla de Nick Nolte, Williman Katt, Tommy Lee Jones o John Travolta.
De nuevo volviendo a la película ‘Carrie’, dos de los descartes que se hicieron para ‘Star Wars’ fueron finalmente fichados por Brian de Palma para su película: John Travolta y William Katt.
En cuanto al personaje de Obi-Wan Kenobi, Alec Guinness nunca fue la opción prioritaria. George Lucas quería para el papel al japonés Toshiro Mifune, que no pudo ser, como sucedió igualmente con Orson Welles. Querían un actor de renombre para ese papel y, finalmente el elegido fue el actor británico.
Aún así, fichar a Guinness fue complicado y costoso. Ya que aceptó el papel después de que le duplicaran el sueldo que le habían propuesto en un principio y aceptaran darle un 2,5% de los ingresos por royalties y no aparecer en actos públicos de promoción de la película.
Y es que Alec Guinness nunca le gustó el personaje. Siempre se ha mostrado muy molesto por ser reconocido por su papel de Obi-Wan Kenobi, que consideraba “insulso, plano y de poca profundidad” y dijo en una entrevista que aconsejó matarlo porque “no soportaba recitar esas líneas de diálogo tan banales”.
Cunado George Lucas tuvo en sus manos uno de los primeros montajes de la película, decidió pedir la opinión de dos de sus amigos, con respuestas dispares: Brian de Palma le dijo que era "la peor película que había visto", mientras que Steven Spielberg auguró que sería un éxito en taquilla y se convertiría en “la película más grande de todos los tiempos”.
El propio George Lucas tenía claro que sería un fracaso, por lo que, en vez de asistir a la premiere de la película, se fue de vacaciones a Hawái, donde coincidió con Steven Spielberg. De aquel encuentro, cuentan, nació ‘Indiana Jones en busca del arca perdida’ (‘Raiders of the Lost Ark’ / ‘Indiana Jones y los cazadores del arca perdida’), dirigida por Spielberg y producida por Lucas.
Al final, ‘Star Wars: Episodio IV - Una nueva esperanza’ fue todo un éxito y se convertiría en la primera película en superar los 300 millones de dólares de recaudación en las taquillas de todo el mundo, un récord que perduró hasta que ‘Titanic’ se lo arrebató en 1997.
ADEMÁS: Las películas favoritas de Steven Spielberg: 19 clásicos y una sorpresa
La compañía distribuidora fue otra que no confiaba en el éxito de la película, por lo que, en un principio, para su estrenó solo distribuyó las cintas por 32 salas de todo el territorio de Estados Unidos, con la sorpresa de que, solo en su primer día, recaudó 254.000 dólares.
Otra anécdota con Spielberg es que, en una visita al set de rodaje de ‘Encuentros en la tercera fase’ (‘Close Encounters of the Third Kind’ / ‘Encuentros cercanos del tercer tipo’, 1977), Lucas tuvo tan claro que sería un taquillazo que propuso a Spielberg cambiar el 2,5% de sus comisiones por los beneficios en taquilla de ambas películas.
‘Star Wars’ cuenta con muchos elementos propios que la hacen muy identificable, como es el caso del texto de apertura, con su especial forma de aparecer en la pantalla. Curiosamente, el de aquella entrega de 1977 fue escrito por Brian De Palma.
Otros de esos elementos son sus soldados imperiales, que, para hacerlos, se basaron en los soldados de la milicia alemana de la Primera Guerra Mundial especializados en técnicas de infiltración. Los denominados Stromtoopers (Sturmtruppen, en alemán).
Los soldados imperiales defendían su régimen bajo las órdenes del malvado Darth Vader, que, aunque para muchos tiene una presencia muy importante a lo largo de la película, solo aparece en torno a 8 minutos a lo largo de todo el metraje.
El personaje de Darth Vader fue creado por George Lucas basándose en el Doctor Doom, villano de los 4 fantásticos (‘Fantastic Four’), de Marvel y Darkseid, de DC Comics.
A Vader, además, le dieron vida dos actores. En el interior de su “armadura” negra se encontraba el actor y fisicoculturista británico David Prowse (foto), pero la voz original del personaje era del estadounidense James Earl Jones. Curiosamente, a pesar de ello, nunca llegaron a conocerse.
Por cierto, que James Earl Jones, que por aquel entonces era un reputado actor de teatro intentando hacerse un hueco en el mundo del cine, pidió (y así lo hicieron) que su nombre no apareciera en los créditos de la película para que no afectara negativamente a su carrera, un error que el mismo reconoció años después.
El característico sonido de respiración persistente de Darth Vader se logró utilizando para ello un equipo de buceo.
Esta primera entrega de ‘Star Wars’ es la única película de la saga en la que no se escucha en ningún momento ‘La Marcha Imperial’ de Darth Vader, lo que tiene una explicación muy sencilla: aún no se había compuesto.
Para el personaje de Chewbacca, a quien daba vida sobre su peludo disfraz Peter Mayhew, George Lucas se basó en un perro que tenía llamado Indiana y su nombre proviene de la palabra de origen ruso, “собака” (Sobaka), que significa precisamente “perro”.
El tema del puritanismo siempre aparece de una manera o de otra y en el caso de ‘Star Wars’ fue por culpa de Chewbacca. Los directivos de la Fox se mostraron preocupados por que el personaje apareciera desnudo y subieran la calificación de edad de la cinta. Sin embargo, Lucas no les hizo caso mostrando su cuerpo peludo en todo su esplendor.
Otra anécdota con Chewbacca surge de la escena en la que, junto a Luke, tratan de escapar de la trituradora de basura. Al terminar fueron incapaces que quitar el olor de aquello del traje que se tenía que poner Peter Mayhew.
ADEMÁS: 1982: el año de las obras maestras del cine fantástico y de ciencia ficción
Aquella misma escena dio lugar a otra anécdota, y es que, aguantando sin respiración el olor de los desperdicios que los rodeaban, a Mar Hammill se le reventó un vaso sanguíneo que le provocó un derrame en uno de sus ojos, lo que obligó al equipo a aplazar su rodaje.
El rodaje de la película se inició en un desierto de Túnez, donde todo el reparto sufrió las altas temperaturas. Un buen ejemplo fue Anthony Daniels, a quien le tocaba enfundarse el traje de plástico de C-3PO. Varios desmayos a causa del calor hicieron que le cambiaran el traje por otro hecho a base de fibra de vidrio.
En el caso del otro droide de la película, R2-D2, interpretado por Kenny Baker, originalmente tenía diálogos en los que el actor hablaba de forma entrecortada, aunque finalmente decidieron reemplazarlos por sonidos electrónicos. Además tenía numerosas palabras malsonantes que provocaban divertidas reacciones de C-3PO que sí se mantuvieron en el metraje.
El nombre R2-D2 surge de la abreviatura de “Reel 2, Dialog Track 2”, que usaba el montajista que trabajó para George Lucas en la película ‘American Graffitti’ (2973).
Para ambos droides, George Lucas se inspiró en dos campesinos que aparecen en la película ‘La Fortaleza Escondida’ (‘Kakushi Toride no San-Akunin’, 1958), de Akira Kurosawa, quienes, como ellos, uno era alto y otro bajo y tenían personalidades completamente opuestas.
Lucas es un director de pocas palabras y poco comunicativo con los actores y, en ese contexto, en medio del rodaje, en un momento que se quedó sin voz, para facilitar la comunicación, se las ingeniaron poniendo en sus manos una pizarra con dos frases: “más despacio” y “más deprisa”.
Como el presupuesto de la película era limitado y los gastos enormes, para sus viajes en avión se decidió que todo el equipo se desplazara en clase turista, algo que no le hizo mucha gracia a la madre de Carrie Fisher, la también actriz Debbie Reynolds, quien llamó a Lucas para exigirle explicaciones. La propia Carrie la desautorizó con un contundente “¿Te vas a la mierda ya?”.
Lo ajustado de ese presupuesto también obligó a que no se pudieran utilizar dobles en algunas escenas, como fue aquella en la que Luke y Leia se cuelgan de un cable para escapar de los soldados imperiales. Con valentía, Hamill y Fisher la rodaron… ¡y en una sola toma!
Durante el rodaje, Harrison Ford y Mark Hamill, que consolidaron su gran amistad durante el rodaje, no dejaban de hacer bromas en el set, algo que solo lograba aplacar el veterano Alec Guinness con su sola presencia. Juventud, divino tesoro…
Como decíamos, el inicio del rodaje llevó al equipo de ‘Star Wars’ a Túnez, donde se vieron obligados a trasladar el “reptador de las arenas” lejos de la frontera con Libia, ya que, pensando que se trataba de un enorme vehículo militar, desde el país vecino habían movilizado a parte de su ejército. El malentendido acabó subsanándose, evitando así males mayores.
También en el desierto tunecino, para rodar los exteriores de Tattoine, se incluyó como decorado el enorme esqueleto del Gran Dragón Krayt, que se quedó allí tras finalizar el rodaje y con el que volvieron a encontrarse en 2002 cuando fueron a rodar ‘Star Wars: Episodio II - El ataque de los clones’ (‘Star Wars: Episode II - Attack of the Clones’).
Otro tema importante para una película como esta era el de los efectos especiales. Por ejemplo, para crear el efecto de que Luke iba sobre un coche volador, se utilizó un espejo debajo del prototipo del vehículo, moviéndose a la vez con un soporte para crear ese efecto.
Sin embargo, la necesidad de contar con unos efectos especiales más avanzados en una época en la que la mayoría de los estudios tenían cerrados estos departamentos, obligó a Lucas a crear su propia compañía, Industrial Light and Magic, con la que ha hecho historia.