¿De qué murió Elena Larrea, modelo y fundadora de Cuacolandia?

Sorpresiva fue la muerte de Elena Larrea, presidenta y fundadora de Cuacolandia, quien también era modelo y una reconocida activista por el bienestar animal.

Foto: Instagram @elenaypunto

Larrea creó en 2019 la asociación civil Cuacolandia, un refugio para caballos, mulas, yeguas, ponis y hasta burros rescatados que, en el pasado, fueron víctimas de maltrato o abandono.

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Fue precisamente Cuacolandia, desde su cuenta en Instagram, la que confirmó el fallecimiento de la también influencer y dio a conocer la causa de su muerte.

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“Con profundo pesar, informamos de la partida de Elena Larrea, presidenta y fundadora de Cuacolandia, quien, lamentablemente, el día de ayer, martes 19 de marzo de 2024, a las 15.30 horas, falleció debido a una trombosis pulmonar que le ocasionó un coágulo en el pulmón. Desde Cuacolandia, sentimos muchísimo su pérdida…

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“…Recordaremos y seguiremos trabajando por todo aquello que con valentía impulsó desde esta fundación. Impulsaremos su legado y amor para que nuestros cuacos, burros y mulares vivan en libertad y en condiciones adecuadas en México y en, éste, nuestro santuario de equinos rescatados de maltrato y abandono”, indicó en un comunicado el equipo de Cuacolandia.

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Por otra parte, el periodista Paulo Yolatl afirmó que la trombosis que sufrió la modelo presuntamente fue derivada de una cirugía estética a la que se sometió hace algunas semanas.

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La fascinación de Larrea por los caballos la tuvo desde que era pequeña, pues su familia tenía cuadras de caballos de carrera, así que su contacto con ellos era muy frecuente, por lo que siempre le llamaron la atención. Incluso decía que, en una vida pasada, seguramente fue un caballo, porque siempre quería estar con ellos.

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Luego tomó clases de equitación a los 7 años. “Fui una gran amazona, o sea, no es por falta de modestia, pero soy una gran jinete. Fui campeona nacional a los 14 años. Si yo hubiera continuado con el gremio de las competencias, te lo juro que ya estaría en las Olimpiadas, pero como que me di cuenta que yo tomaba mucho de los caballos…

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“…No digo que estoy en contra de la equitación, pero como funciona es que tienes a tu caballo en su caballeriza 24 horas y lo sacas una o dos horas al día para trabajar (…). Y el caballo no tiene una vida social. Los caballos son de manada, tienen que correr, galopar, revolcarse, todas esas cosas que son básicas para el bienestar de un animal para su salud mental y yo los privé de eso como la mayoría de la gente que monta a caballo”, expresó la influencer en entrevista con el comunicólogo Erick Nuñez.

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Y cuando creció, Larrea comenzó a cuestionarse si los caballos eran sus compañeros o sus esclavos, y por eso cambió su visión. Y ahí decidió que quería regresarles algo de lo que les había tomado.

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Y, en 2019, fundó su asociación civil Cuacolandia, un refugio establecido en Atlixco, Puebla. “De eso se trata Cuacolandia. Es un lugar en donde yo les regreso la libertad que el humano les arrebató, que incluso yo misma les arrebaté cuando era más chica y no me autopreguntaba si estaba bien hacer ciertas cosas”, señaló la activista a Erick Nuñez.

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Y aunque, al principio, Cuacolandia se sostenía gracias a las donaciones y “adopciones” de caballos, con la pandemia del COVID-19 tuvo problemas para continuar.

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Debido a lo anterior, la activista decidió incursionar en el modelaje y en una plataforma de contenido para adultos, lo que le permitió conseguir ingresos y seguir sosteniendo el santuario de animales.

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“Fue una época muy oscura, ya no tenía dinero (…). Decía no sé qué más vender, no sé qué más hacer para que la gente me ayude, ya no tengo ingresos, y un amigo me dijo por qué no abres On ly… y yo le dije que no fuera descarado”, contó la influencer, quien al final sí sacó su cuenta en la plataforma de contenido para adultos.

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Y sus redes comenzaron a aumentar en seguidores, porque anunció que todas sus ganancias serían para rescatar caballos, y su historia se hizo viral y mucha gente se interesó en su proyecto. Tan sólo en Instagram tenía 468 mil seguidores.

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“Es mucho amor el que yo les tengo a esos animales. La gente no dimensiona lo que yo soy capaz de hacer (…).  Yo estoy dispuesta a hacer lo que tenga que hacer para seguirlos sacando de las calles, porque lo merecen y porque nadie más lo hace”, afirmó Larrea.

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Uno de sus últimos logros fue conseguir que en el estado de Puebla la zoofilia fuera tipificada como un delito, pues el caso de Mila, una potranca rescatada por el personal de Cuacolandia que sufría abuso sexual por parte de su exdueño, fue clave para que las autoridades tomaran esa decisión.

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