Aunque no se parecen, son hermanas (o hermanos) de famosos
Cuesta creer que Ashton (1978) y Michael (1978) sean gemelos, pero lo son. La diferencia es que Michael fue diagnosticado con parálisis cerebral a los 3 años. Y trasplantado de corazón a los 13. Ahora se dedica a dar charlas y luchar por los derechos con niños con su afección. ¡Bravo por él!
La artista total, criada en el Bronx, tiene una hermana que nadie diría que lo es. Lynda (1971) está muy unida a Jennifer (1969), aunque prefiere mantenerse alejada de los focos y los flashes.
Uno es guapo y otro es muy guapo, cada cual que decida el orden. Estos hermanos, además de compartir banda (30 Seconds to Mars), comparten pacto con el diablo. Jared (1971) y Shannon (1970) no se parecen en nada, pero ninguno aparenta los años que tiene.
Sí, son hermanas. Y sí, las dos son actrices de éxito. Ni siquiera viendo a Kate (1983) y Rooney (1985) juntas, es fácil sacarles parecido. ¿Qué tienen en común, además del apellido? Su mirada paralizante.
Sí, los tres son rubios, guapos y con los ojos azules, pero si no se conoce el apellido, no es fácil adivinar que sean hermanos. Liam (1990), Chris (1983) y Luke (1981) triunfan como actores y tienen unos genes envidiables, pero parece que diferentes.
Las pequeñas del clan Kardashian han conseguido la relevancia de sus hermanas (Kim Kardashian, Kourtney Kardashian y Khloé Kardashian), en mucho menos tiempo. Kendall (1995) es una de las top model más respetadas y solicitadas del mundo. Kylie (1997), la milmillonaria más rápida de la historia. Ahora, no se parecen y eso es un hecho.
Cuando eran pequeños, a su manera, se parecían a Lady Di. Con el paso de los años, los dos se van pareciendo cada vez más a su padre. Ahora, de momento, William (1982) y Harry (1984) parecen más primos lejanos que hermanos.
Kim (1980) y Khloé (1984) son hijas de Kris Jenner y Robert Kardashian, pero nadie lo diría. Las diferencias físicas entre ambas son notables y ni siquiera su paso por el mismo cirujano ha igualado a ambas estrellas de la telerrealidad.
No sólo son hermanos, sino que Hunter (1984) y Scarlett (1984) son gemelos. Los dos son rubios. Y ya. Bueno, comparten apellido.
La hermana mayor de Ryan Gosling (1980) ha sido la responsable de criar al actor, como él mismo ha admitido. De hecho, Mandi Gosling (1977) ha acompañado a su hermano en varias alfombras rojas de relevancia
Criados en el seno de una familia de pastores pentecostales, Katy (1984) y David (1988) han acabado siendo los dos cantantes. Compartieron infancia sedentaria, pues sus padres iban predicando por diferentes iglesias de todo Estados Unidos. A pesar de pasar tanto tiempo juntos, no han llegado a parecerse demasiado.
No es que se lleven 15 años, es que Robyn (1972) y Blake (1987) tienen un parecido casi nulo. Obviamente, la hermana pequeña es la más conocida, pero ojo con Robyn que tiene una filmografía interesante.
Estas hermanas tienen truco, pues son hermanas únicamente ya que tienen la misma madre (pero padres diferentes). A pesar de ello, Demi Lovato (1992) y Madison de la Garza (2001) no parecen ni familiares. Eso sí, comparten profesión como actrices, aunque con diferente grado de éxito.
Provienen de familia cinematográfica y ambos han triunfado por separado. Es fácil caer en que Maggie (1977) y Jake (1980) son hermanos, por el complicado apellido que tienen. Ahora, parecerse, lo que se dice parecerse, no es que se parezcan demasiado.
Si los dos achinan los ojos al reírse, sí se les puede sacar parecido. Si uno sonríe y otro está serio, parecen hasta dos extraños en la foto. Lo cierto es que James (1978) y Dave (1983) son hermanos, actores y muy guapos.
El apellido real de la familia es Estévez, pero sólo Emilio (1962) lo ha conservado. Carlos Irwin Estévez prefirió cambiárselo por el de Charlie Sheen (1965), mucho más hollywoodiense. No, su padre no se enfadó. Más que nada porque se cambió su Ramón Antonio Gerardo Estévez Phelan por Martin Sheen (1940).
La familia Cyrus tiene ese aura que hace que todos sus miembros se parezcan un poco. No hay más que ver a su madre, Trish, que tiene un poco de cada una de sus hijas. Ahora, entre todos los miembros, Miley (1992) y Noah (2000) son las que menos se parecen.
Dos actrices de renombre, mundialmente conocidas y, salvo por el apellido, nadie diría que son hermanas. Pero lo son. Zooey (1980) es hermana pequeña de Emily (1976).
La familia Wilson tiene claro que la interpretación se lleva en la sangre. Andrew (1964), Luke (1968) y Owen (1971) son de esas familias que cae bien a todo el mundo. Ahora, ni uno de los tres se parece a otro.
Ella fue la adorable Olive en 'Pequeña Miss Sunshine'; él fue el incordiante Rusty en 'The Kid'. Y sí, Spencer (1992) y Abigail (1996) son hermanos y nacidos en Nueva York.
Que Ariana (1993) y Frankie (1983) no se parezcan, puede deberse a que son hijos de la misma madre, Joanna Grande, pero no del mismo padre. De hecho, no todo el mundo sabe que la cantante tiene un hermano.
Lo curiodo se Oliver (1976) y Kate (1979) no es que sean hermanos, es que los dos son muy famosos pero poca gente sabe que están emparentados. De hecho, ni siquiera viéndoles juntos se diría que son hermanos.
La familia Tyler es feliz y está muy bien avenida ahora, hay que reconocer que cada hermano parece de una familia diferente. Aún así, Liv (1977), Mia (1978), Chelsea (1989) y Taj (1991) tienen un aire a su mítico padre.
Son hermanos de sangre, incluso tuvieron su propia serie 'Más que hermanos', pero poca gente se cree que lo sean de verdad: Joey (1976), Matthew (1980) y Andrew (1988) se parecen solo en el apellido.
Las dos cantantes comparten profesión y sonrisa, pero verlas juntas no supone afirmar de forma categórica que sean hermanas. Kylie (1968) y Danni (1971), eso sí, están estupendas.
Kim (1966) y Keanu (1964) son hermanos de sangre, aunque se parezcan más bien poco. Además, está Karina Miller (1976), con quien comparten madre y a quien se parecen menos aún.
Bruce Willis y Demi Moore tuvieron tres hijas: Rumer (1988), Scout (1991) y Tallulah (1994). Las tres son una mezcla curiosa de sus dos famosos padres, el problema es que cada una tiene una dosis diferente de sus progenitores.
Los hijos del legendario productor Aaron Spelling han heredado la fortuna del padre pero será lo máximo que compartan. Tori (1973) y Randy (1978) parecen tener genes distintos, pues nadie diría que son hermanos.