Las rivalidades más sonadas en la historia de la música
Estas rivalidades han marcado la historia de la música, alimentando la creatividad y la competencia, pero también los chismes y habladurías. Cada una de ellas refleja las tensiones inherentes al arte y la fama.
La rivalidad clásica del rock de los 60s, alimentada por los medios para representar dos caras del género; Los Beatles, la cara amable y melódica, frente a The Rolling Stones, el lado rebelde y crudo. Lo más curioso es que, hasta la fecha, tanto los miembros sobrevivientes de The Beatles como la alineación de The Rolling Stones siguen publicando en sus redes sociales al respecto... alrededor de 60 años después.
Estos grupos son los más icónicos representantes del britpop de los 90. Su rivalidad alcanzó su punto álgido cuando ambas bandas lanzaron sencillos el mismo día, compitiendo directamente por las listas de éxitos en el Reino Unido. Por otro lado, Oasis provenía de Manchester, representando a la clase trabajadora; mientras Blur provenían de Londres y representaban a la clase media.
Los dos iconos más representativos del pop de los 80, ambos bailarines, cantantes y compositores de tesitura aguda. Su rivalidad se centró en quién era el verdadero rey del pop. Aunque había respeto mutuo e incluso llegaron a colaborar, los medios a menudo los comparaban. Curiosamente, ambos siempre estuvieron rodeados de polémica y tuvieron muertes trágicas.
A pesar de ser amigos en sus primeros días de fama, su relación se tensó con el tiempo, incluyendo malos comentarios de uno sobre el otro, así como disputas personales y profesionales, aunque ambos negaron siempre una rivalidad seria.
Ambas surgieron como estrellas del pop adolescente en los 90 y fueron retratadas por los medios como rivales, aunque negaron repetidamente tener una verdadera enemistad. El culmen de su negación de esta rivalidad, fue a través de la actuación que ambas realizaron con Madonna en los MTV Video Music Awards del 2003, actuación que quedó marcada por el beso que protagonizaron.
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Representando el glam rock y el grunge, respectivamente, su rivalidad destacó las diferencias entre los géneros y sus fans en los 90, ya que los grungeros despreciaban todo lo que tenía que ver con el glam, por considerarlo trivial y sexista. El mejor ejemplo de esta rencilla fue durante en la presentación que realizó Nirvana antes de Guns’n Roses en los MTV Video Music Awards de 1992, en la que éstos destrozaron los instrumentos con los que posteriormente tocarían Guns´n Roses mientras Dave Grohl repetía constantemente “Hi Axel”.
Después de que Waters dejara Pink Floyd, surgieron tensiones legales y personales sobre los derechos del nombre de la banda y la dirección creativa. Esta es otra rencilla que sigue en pie de vez en cuando, a través de las redes sociales de ambos, aunque frecuentemente se muestran de lo más amigables, incluso tocando juntos.
Entre el disgusto que el líder de Queen sentía en general por el movimiento punk, un intento de amistad fallido con los integrantes de Sex Pistols y encuentros personales hostiles entre el líder de Queen y el bajista de Sex Pistols, esta rivalidad fue un reflejo de las tensiones entre el rock progresivo y el punk rock.
Tal vez este sea el ejemplo perfecto de una rivalidad bien encausada. En esta rivalidad amistosa, Clapton y Hendrix eran a menudo comparados por su habilidad con la guitarra, pero ésto sólo conseguía que ambos se empujaran mutuamente a nuevos límites creativos.
Una rivalidad ampliamente mitificada, especialmente por la película "Amadeus", donde se retrata a Salieri como envidioso y saboteador. La realidad es que al principio fueron tan amigos que hasta compusieron una cantata juntos (desaparecida hasta 2016) , pero el éxito inconmensurable de Mozart, amargó a Salieri.