Deportistas que han roto el silencio sobre su salud mental

La presión, la ansiedad y las dificultades personales, comunes en la vida de cualquier individuo, revelan a menudo el lado más vulnerable de muchos deportistas que, generalmente, son percibidos como invencibles. Reconocer y discutir abiertamente sus problemas de salud mental no sólo es un acto de valentía, sino también una fuente de esperanza. Esta visibilidad puede brindar apoyo a muchas otras personas que enfrentan situaciones similares. Uno de los ejemplos más conocidos es el de la gimnasta estadounidense Simone Biles, aunque son varios los deportistas que han decidido hablar públicamente sobre sus experiencias.

La presión, la ansiedad y dilemas personales, comunes a toda la población, pueden llevar incluso a los deportistas, quienes frecuentemente son percibidos como figuras invencibles, a enfrentar desafíos relacionados con su salud mental, exponiendo así su vulnerabilidad. No obstante, es precisamente el acto de compartir estas experiencias lo que se revela como un genuino acto de valentía y ofrece un rayo de esperanza. Al visibilizar estas luchas, se brinda apoyo a innumerables individuos que atraviesan circunstancias similares. Uno de los ejemplos más notorios en este aspecto es el de la gimnasta estadounidense Simone Biles, aunque son varios los deportistas que han tenido la audacia de hablar sobre el tema.

Simone Biles es un claro ejemplo de cómo atreverse a lidiar con problemas de salud mental. Fue durante lo Juegos Olímpicos de Tokio 2020 cuando no dudó en abandonar algunas de las competiciones ya que su mente y su cuerpo estaban absolutamente desconectados.  “Trabajar cinco años por un sueño y tener que renunciar a él no fue nada fácil”, reconoció en una entrevista a la NBC. Tras ello, comenzó a ir a terapia, lo que le permitió trabajar en esas cuestiones y volver por todo lo alto, como demostró en los Juegos Olímpicos de París 2024.

El nadador estadounidense Michael Phelps, el deportista olímpico con más medallas (nada menos que 28), también ha luchado contra este tipo de problemas de salud mental. En World Business Forum #WOBI, celebrado en Madrid en noviembre de 2023, dijo que, en 2004, año en el que ganó sus ocho primeras medallas olímpicas, tuvo su primera depresión y, tiempo después, en 2014, la segunda. "No quería estar vivo. No comía, no bebía, me fui a un centro de recuperación. Estaba luchando por mi vida más de lo que la gente podía imaginar". Afortunadamente se puso en tratamiento y consiguió mejorar. "Una de cada cuatro personas tiene un problema de salud mental y no lo hablan. Si todos habláramos es algo que se normalizaría", añadió.

El futbolista español Andrés Iniesta sufrió un episodio depresivo que se desencadenó tras la muerte de su amigo, el futbolista Dani Jarque, en el verano de 2009. "Cuando estaba luchando contra la depresión, el mejor momento del día era cuando tomaba mis pastillas y me acostaba. Perdí las ganas de vivir. Abracé a mi esposa, pero era como abrazar una almohada. No sientes nada", contó en el podcast 'The Wild Project'. Ahora, aunque está mejor, sigue yendo a terapia porque, en sus palabras, necesita arreglarse consigo mismo.

La tenista japonesa Naomi Osaka sufría una depresión silenciosa que se puso de manifiesto en Roland Garros 2021, cuando se negó a dar una rueda de prensa aduciendo problemas de salud mental. Después de que el torneo la amenazara con la expulsión, un día después abandonó.  "Nunca banalizaría con la salud mental o usar ese término de forma tan fácil. La verdad es que he sufrido largos problemas de depresión desde el US Open 2018 y me está costando mucho lidiar con ello", explicó en un duro comunicado. "No es que haya tenido una infancia oscura ni nada por el estilo, es sólo que todo en mi vida estaba muy centrado en el tenis", contó después en el podcast 'Mountaintop Conversations'.

Quien fuera considerado como uno de los mejores quarterbacks de la NF, Tom Brady, contó en el podcast 'Let's Go!', que tuvo que recurrir al libro 'Calm Your Mind With Food' ('Calma tu mente con comida'), escrito por la psiquiatra Uma Naidoo, para intentar mejorar su propio bienestar mental. "Un libro excelente, con un enfoque excelente para la salud", escribió Brady en su cuenta de Instagram.

El jugador de baloncesto Lebron James habló en una entrevista en el podcast 'Let's Taco 'Bout It'!, sobre asuntos relativos a su salud mental. "A veces está bien contenerse, pero si lo haces durante demasiado tiempo, puede volverse abrumador". reconoció. “Le diría a mi yo más joven que se asegure de comunicarse, de dejar en claro cómo se siente y de hablar sobre las cosas”, agregó.

El futbolista mexicano, en una entrevista concedida a Lindsey Casinelli, de TUDN, reveló que tuvo una depresión muy profunda cuando murió su abuelo, que coincidió con su proceso de divorcio. "Lo único que me hizo salir de esa depresión, la única respuesta y resultado fue que nadie más me iba a sacar de ahí que no fuera yo”, dijo.

Tras la muerte de su madre, Ricky Rubio cayó en una depresión que le llevó a alejarse del baloncesto. “No lo puedo poner en palabras, pero estaba muy perdido, no quería acercarme al baloncesto y empecé a odiarlo", contó en una carta publicada en The Player's Tribune. En febrero de 2024, en su presentación con el Barcelona, el baloncestista dijo que sufrió un estrés crónico que desestabilizó su organismo. "He estado en la oscuridad, pero trabajando y con la ayuda de los profesionales necesarios, se puede salir. Una palabra, un abrazo, un 'estoy aquí', todo ayuda. Me he salvado y ahora estoy a gusto. Estoy orgulloso de mí mismo. Le doy una nueva oportunidad al baloncesto", fueron sus palabras.

La lanzadora de peso estadounidense Raven Saunders también sabe lo que es verse caer en la oscuridad de los problemas de salud mental. "Era como si nadie realmente entendiera el dolor y los desafíos por los que estaba pasando", explicó en una entrevista a la CNN. Gracias al tratamiento, su situación mejoró y siempre estará agradecida por ello a la Universidad de Mississippi por ayudarla a tratarse a principios de 2018.

El futbolista español Jesús Navas estuvo a punto de dejar su brillante carrera futbolística por la ansiedad que sufría, lo que hacía que ni siquiera pudiera dormir concentrado con sus compañeros de equipo, pues sentía miedo de alejarse de sus padres. Gracias a sus familiares y amigos consiguió mejorar.

En una entrevista a COPE, el futbolista español reconoció que sufre ataques de pánico y depresión."He estado medicado, he tenido que tomar de todo", dijo. "Mi objetivo no es dar pena, llorar ni quejarme. Acepto las críticas sobre mi trabajo y no quiero que se desvíe la atención. Mucha gente lo comparte y se siente identificada y quiero dar visibilidad al asunto. Estoy recuperado, con muchas fuerzas y ganas de estar en la selección", explicó en octubre de 2024 en la rueda de prensa previa al partido de España ante Dinamarca de la Nations League.

“Hoy no estoy bien. Y no pasa nada por no estar bien. Nadie está bien todos los días. Si no estás bien hoy, estoy contigo. Siempre hay un mañana. Te quiero", escribió Williams en X en 2022. "La salud mental para mí es simplemente aprender a desconectar. Inconscientemente es algo que siempre he hecho. Y ahora que sé que es tan importante ponerse en primer lugar, sobre todo mentalmente, siempre tengo momentos de desconexión", reconoció en 2022 en la plataforma de salud mental 'Wondermind'

Los problemas de salud mental del exboxeador británico Ricky Hatton derivaron a su vez en otros de alcholismo. "Me estaba saliendo de los rieles con la bebida y eso me llevó a las drogas. Era como un tren fuera de control", contó en una entrevista de BBC Radio. "Solía ir a un bar, regresar, tomar un cuchillo y sentarme en la oscuridad a llorar", agregó.

Otro exboxeador británico que ha hablado de sus problemas de salud mental es Tyson Fury. "La ansiedad es una de las peores cosas que cualquiera podría tener", dijo en una ocasión en una entrevista en 'The Guardian'. Afortunadamente, aunque reconoció que tardó en hacerlo, acabó pidiendo ayuda.

"Llegaba una ola gigante y me arrasaba. Aparecía de repente y me llevaba por delante. No podía hacer nada, no conocía las causas, no la veía venir y era incontrolable. Hubo momentos en los que no veía salida. La bola iba creciendo y creciendo y me dominaba. Me asfixiaba", contó en una entrevista concedida a El Mundo en marzo de 2024 quien fuera considerado durante una época el niño bonito del fúbol español. Toda se lucha para solucionar sus problemas de salud la cuenta en su libro 'Controlar lo incontrolable' (Alienta Editorial).

Los problemas de salud mental que sufría la jugadora de fútbol estadounidense Abby Wambach la llevaron a consumir alcohol y otras sustancias estupefacientes. Ella misma cuenta su experiencia en su libro 'Forward: A Memoir'.

En una carta escrita en 2018 para The Players Tribune, el jugador de baloncesto estadounidense se atrevió a hablar de sus problemas de salud mental. "Hay días que son muy duros", aseguró en una entrevista al programa 'In Depth with Graham Bensinger', donde reconoció que en 2012 llegó a pensar en quitarse la vida.

El exjugador inglés de rugby Jonny Wilkinson contó en una entrevista concedida al medio The Express que tuvo problemas de salud mental durante toda su vida. "Tenía momentos en los que iba a hablar con mi familia antes de los partidos de Inglaterra desde el hotel del equipo, donde estaba a segundos de ir a decirle al entrenador que no podía jugar. 'Inventa una excusa para no hacerlo'. Ese era el estado en el que estaba. Fue puro pánico. Caos".

En la biografía de André Agassi, titulada 'Open', el extenista habló de sus problemas de salud mental. Unos problemas que, según cuenta, podrían haberse derivado de la presión excesiva que su padre ejercía sobre él. Con la ayuda de profesionales, Andre Agassi pudo comenzar a dejarlos atrás.

Paul Gascoigne, uno de los mejores futbolista ingleses, también cayó en problemas de salud mental. Según cuenta él mismo en un documental sobre su vida, se remontan a la lesión de rodilla que sufrió mientras jugaba para el Tottenhan en la final de la Copa FA de 1991. El futbolista se refugió en la bebida desencadenando un verdadero problema de alcoholismo. Ahora dice que trata de no deprimirse "porque el mundo ya está bastante deprimido y cuando estoy realmente deprimido, es cuando tomo una bebida para animarme".

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