'Casi no queda nada', revela hijo de Gina Lollobrigida sobre su herencia
Desde que falleció el 16 de enero de 2023 a los 95 años, parece que la eterna diva aún no puede descansar en paz: abogados y jueces están de por medio y un patrimonio saqueado desde hace años, al menos según declaró su hijo. Milko Skofic, al Corriere della Sera.
En su testamento, Gina Lollobrigida destinó la mitad de su patrimonio a su hijo Andrea Milko Skofic y la otra mitad a Andrea Piazzolla (en la foto), un asistente que la ayudó en los últimos 10 años de su vida, pero que fue denunciado por el hijo de la actriz por el presunto despojo de los bienes de su madre.
Desde el pasado mes de febrero, el patrimonio de Gina Lollobrigida ha sido inspeccionado en al menos diez visitas (según Corriere della Sera), en las que notarios y abogados han valorado su legado en algo más de 600.000 euros.
En el inventario se encuentran: 50.000 euros de obras de arte; joyas y relojes por valor de unos 15 mil euros; muebles antiguos, platería, fotografías de autor por valor de 152 mil euros; 44 pequeñas esculturas referentes a premios y galardones. El inventario también incluye el capital de Dousoline, una sociedad en el Principado de Mónaco representada en 200 acciones, según Open.online.
Ante la cifra estimada, el hijo de Lollobrigida se mostró incrédulo, dada la dilatada y prolífera carrera de su madre. Se lo comentó a Ilaria Sabatoni del Corriere della Sera, en una entrevista publicada el pasado 1 de mayo: "Estoy asombrado de que, al final de una larga y fructífera vida artística en la que había acumulado una enorme fortuna, cuando falleciera, lo hiciera como propietaria de tan poco".
“En las cuentas corrientes no había casi nada, hasta el punto de que se pidió a la administradora de manutención que saldara las facturas de la atención dental, por unos miles de euros”, prosigue el hijo de la actriz. Todo lo que queda es preguntarse qué pasó con la herencia de Lollo.
Sí, porque al parecer habrían desaparecido varios millones de euros, al menos según informan varios diarios.
Y obviamente llegan las acusaciones contra Piazzolla: "Cuando llegó Piazzolla el patrimonio de mi madre era más que bueno, alcanzaba para hacer una vida larga y digna, rica, pero no exagerada. Ahora ya no queda casi nada".
La acusación que se le hace a Piazzolla es la de burlar a un incapacitado, por lo que supuestamente le robó a Lollobrigida gran parte de su patrimonio. La sentencia del primero de los tres procesos seguidos en su contra debería haberse dictado el 7 de junio.
El hijo de Lollo no puede dar una respuesta clara a esta pregunta: "No puedo decir la cantidad exacta de lo que se llevó, pero las cuentas corrientes están casi vacías, los apartamentos en Piazza di Spagna se han vendido y las ganancias han desaparecido". Lo mismo ocurrió con la casa de Montecarlo, ni rastro ni siquiera de los más de tres millones de euros de la colección de joyas vendida por Sotheby's en 2013".
Además, Milko Skofic afirma que, mientras tanto, Piazzolla vivía una vida más que cómoda, compraba autos de lujo, viajaba en helicóptero y sacaba decenas de miles de euros en efectivo y con tarjeta de crédito.
Por no hablar de los cientos de miles de euros que llegaron a los bolsillos de la familia de Piazzolla, de nuevo según contó a Corriere el hijo de Lollo.
El abogado de Milko Skofic, Michele Gentiloni Severi, por su parte, asegura que "al menos 7 millones de euros han desaparecido. Éramos conscientes de los regalos que Lollobrigida hizo a Piazzolla y su familia por unos cientos de miles de euros a los que hay que restar del dinero". Procede de la venta de apartamentos en el centro de Roma, en Piazza di Spagna, y todos estos son atribuibles a Piazzolla", según informa la revista Oggi.
Según una investigación de L'Espresso del pasado mes de abril, varios millones de euros pertenecientes a la diva se encuentran presuntamente en un paraíso fiscal.
Sería una tesorería offshore llamada Bewick International Inc., ubicada en Panamá. Sorprendentemente, pareciera que el mandato para el manejo de fondos dentro de esta empresa pertenece a “Luigia Gina Lollobrigida”, el verdadero nombre de la actriz.
Se afirma que en 2014, la artista obtuvo autorización para abrir una cuenta en el banco Safra, en el Principado de Mónaco, con amplios poderes para administrar todos los fondos.
Del Principado de Mónaco faltarían 3,9 millones de euros, procedentes de la venta de las preciadas joyas de la actriz durante una famosa subasta celebrada en Londres.
El abogado de Milko Skofic también se pronunció al respecto, en L'Epresso: "Nuestros documentos muestran la existencia de al menos una empresa en un paraíso offshore, pero ni siquiera los jueces italianos conocen su nombre. Su capital está representado por 200 acciones que para fecha no figuran en el inventario de herencias: desde hace años se desconoce quién las posee".
Por otro lado, para hablar a favor de Piazzolla está Antonio Ingroia, quien asistió legalmente a la actriz en sus últimos años de vida: "Lollobrigida estaba firmemente decidida a no dejarle nada a su hijo [...] Creo que no tenía un particular interés en conservar su patrimonio", sus palabras relatadas por Oggi.
Además, Ingroia cree que la actriz pudo haber actuado intencionadamente al dejar parte de su patrimonio a Piazzolla, en quien había encontrado una figura que la llenaba de atención.
Una historia realmente sombría que ciertamente aún no ha terminado. Solo tenemos que esperar las implicaciones futuras en cualquier sentencia, apelación y resolución.