¿Qué fue de Molly Ringwald de 'El club de los cinco'?

Molly Ringwald fue una de las adolescentes más queridas y famosas del cine de los 80. Un producto de éxito creado por la maquinaria de Hollywood que acabó alejada de la Meca del Cine y del estrellato, pero no por culpa de la industria, sino porque se reveló y huyó de ella, aunque nunca ha soltado su mano del todo…

Molly Ringwald se convirtió en musa del director John Hughes, para quien protagonizó una conocida trilogía adolescente, fue considerada miembro del ‘Brat Pack’ -del que ella misma quiso desligarse en años posteriores- y hasta fue portada de la revista ‘Time’. Estuvo en lo más alto y, desde allí, terminó cayendo…

Pero, ¿dónde se ha metido actualmente Molly Ringwald? En realidad, más cerca de lo que podríamos llegar a pensar. Nunca abandonó la interpretación, aunque sí lo hizo con su estatus de icono adolescente y sigue siendo una actriz de presente y de futuro, además de una persona comprometida con causas como el feminismo.

En el ámbito profesional, a Molly Ringwald la hemos visto recientemente en el papel de Mary Andrews en la serie ‘Riverdale’, apareciendo ininterrumpidamente entre los años 2017 y 2022. Su personaje no es otro que el de la madre de Archie y esposa de Fred (Luke Perry).

Su personaje en ‘Riverdale’ tiene ciertas similitudes con su vida real. La vida de una mujer que dejó la ciudad de Riverdale -o Los Ángeles- para perseguir sus sueños -o vivir la vida que deseaba-.

No es la única serie por la que ha pasado estos últimos años. Ahí están otros títulos como ‘Creepshow’, donde participó en un capítulo en 2021 haciendo de Mrs. Porter; ‘The Bear’ (2022), en la que también aparece en un episodio como moderadora; o, sobre todo, ‘Dahmer’, una miniserie de Netflix sobre el Monstruo de Milwaukee que se ha estrenado en 2022.

En cuanto a la gran pantalla, a la buena de Molly Ringwald la hemos podido ver en varias producciones, aunque ninguna de gran nivel. Entre los títulos en los que ha participado últimamente están la segunda y tercera entrega de ‘Mi primer beso’ (The Kissing Booth / El stand de los besos), de 2020 y 2021, respectivamente, completando la trilogía de Netflix, puesto que ya fue parte del reparto de la primera película de 2018.

La actriz forma también parte de la segunda temporada de la serie ‘Feud’, a la que han llamado ‘Feud: Capote’s Women’, donde dará vida a Joanne Carson, la segunda esposa del famoso presentador televisivo estadounidense Johnny Carson, que fue a su vez una buena amiga de Truman Capote y permaneció cerca de él hasta su muerte.

Pero en los últimos tiempos, Molly Ringwald no sólo ha sido noticia por su trabajo, sino también por sumarse al movimiento feminista contra el acoso #MeToo, algo que dejó patente a través de un artículo que publicó en 'The New York Times' en 2018, recordado “sus propios Harvey Weinsteins”.

Entre aquellos “Weinsteins” -sin nombres y apellidos- que citó Molly Ringwald, estaban un operario de 50 años que no respetó su espacio vital cuando solo tenía 13; un director que intentó besarla en pleno rodaje, cuando tenía 14 años y aquellos que la obligaron en un casting “humillante” a hacer una escena en la que la ataban un cinturón al cuello, algo que no venía en el guión que le habían dado.

“Mientras yo me embarcaba en mi despertar como mujer, trabajaba rodeada de hombres empeñados en acelerar el proceso”, señalaba Molly Ringwald en su artículo.

Los hechos que denunciaba en su artículo ocurrieron a principios de los 80. Era la época en la que Molly Ringwald comenzaba su carrera como actriz y que pronto la convertiría en uno de los grandes iconos adolescentes de la historia del cine.

Molly Ringwald debutó como actriz en 1982 -con solo 14 años- en la película ‘La tempestad’ (‘Tempest’) y fue ahí donde el director John Hughes se fijó en ella y decidió convertirla en su protagonista y musa para la trilogía de películas adolescentes formada por ‘Dieciséis velas’ (‘Sixteen Candles’, 1984), ‘El club de los cinco’ (‘The Breakfast Club’, 1985) y ‘La chica de rosa’ (‘Pretty in Pink’, 1986).

Fueron las películas que la lanzaron a la fama e hicieron de ella ese icono adolescente para la historia. Además, en ellas coincidió con actores como Emilio Estévez o Anthony Michael Hall, con los que formó parte del ‘Brat Pack’, el conocido grupo de jóvenes actores de los 80, al que ella ha confesado que nunca ha sentido pertenencia.

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John Hughes escribió sus personajes para ella, pensando en ella. Fue una persona que le hizo sentir especial y a quien, posteriormente, acabó rompiendo su corazón cuando, en 1991, decidió dar la espalda a Hollywood e irse a París a vivir la vida y disfrutar como veinteañera que era.

Fue en aquel momento cuando rechazó dos importantes papeles protagonistas con los que, quizás -nunca se sabrá-, podía haber dado el salto definitivo en su carrera. Fueron los de Vivian Ward en ‘Pretty Woman’ (Mujer Bonita, 1990) y Molly Jensen en ‘Ghost' (Ghost, más allá del amor / Ghost, el fantasma del amor / Fantasma / Ghost, la sombra del amor, 1990) papeles que sí fueron claves en las carreras de Julia Roberts y Demi Moore.

Como ella misma dijo en su “huida”, aquel distanciamiento que tuvo con Hollywood fue una decisión personal y nada relacionada con el fracaso. "No estaba casada, estaba en mis veinte y pensé que si había un momento para viajar, era ese", declaró en una entrevista a 'The Atlantic'.

Después de aquello, la carrera de Molly Ringwald fue para abajo y las películas en las que fue trabajando en años posteriores ayudaron a que perdiera su estrella. Títulos como ‘El cazachicas’ (‘The Pick-Up Artist’, 1987), ‘Jóvenes ardientes’ (‘Fresh Horses ‘, 1988) o ‘Boda pasada por agua’ (‘Betsy's Wedding’, 1990), fueron graves errores en su carrera.

Fue a partir de entonces cuando la carrera de Molly Ringwald se empezó a mover por el mundo del cine para televisión y con cintas de poca relevancia y bajos presupuestos. Una deriva que ha seguido así hasta la actualidad, donde ha participado en varios trabajos por los que está empezando a volver a dar que hablar, aunque a años luz de sus tiempos de éxito.

Hoy en día y bajo la bandera del movimiento #MeToo, ha criticado el fondo de aquellas películas por las que se hizo famosa, por su carácter machista y sexista, según sus palabras, aunque, eso sí, como ella misma declaró "Estoy orgullosa de esos papeles. (…) Me siento tremendamente halagada de que signifiquen tanto para una generación. Es una parte fundamental de mi vida", recogía 'The New Yorker'.

En la actualidad, Molly Ringwald vive una nueva época como actriz -y también como escritora-, muy distinta a la aquella adolescente triunfadora. Hoy, en plena madurez, ha hecho papeles de madre y hasta de abuela, y bajo la nostalgia convertida en ironía de la vida, tal y como se describe en su cuenta de Twitter: “Tu antiguo crush adolescente…".

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