Extraños lujos que fueron encontrados en una prisión venezolana

Venezuela es el país de reinas de belleza, playas paradisíacas, la cascada más alta del mundo y... un gobierno que lucha por controlar la sociedad. De hecho, la anarquía reina bajo el régimen socialista de Nicolás Maduro, aunque hace todo lo posible por limitar el voto, la propiedad y los derechos humanos de su pueblo.

Desde las calles de la ciudad hasta el campo, las playas y el Amazonas, las bandas criminales se han creado espacios para gobernar y explotar el país. La anarquía general en Venezuela, confirmada por medios como The New York Times, Fox Business ('Pirates Rule') y Reuters ('Mad Max Violence'), afecta incluso al único lugar donde se supone que el Estado tiene la ventaja absoluta: la prisión.

Un ejemplo curioso es el Centro Penitenciario de Tocorón. Normalmente, una prisión como ésta debería estar dirigida por autoridades policiales y militares, pero aquí ha sido dirigida por bandas criminales. La banda líder se llama 'El Tren de Aragua', en honor a la región donde se encuentra la cárcel.

La prisión fue construida a principios de los años 80 para albergar a 750 reclusos. Sin embargo, en 2016 albergaba a una población de más de 7.000 presos. Una situación insostenible.

Foto: Matthew Ansley / Unsplash

Después de años de locura, el gobierno venezolano decidió retomar el control de la prisión. Fueron necesarios aproximadamente 11.000 efectivos de seguridad para ingresar a la penitenciaría y recuperar el control del complejo. Lo que encontraron cuando llegaron fue absolutamente impresionante.

¿Qué vieron las autoridades cuando finalmente pudieron ingresar al mundo revuelto de la prisión de Tocorón? Eche un vistazo en las siguientes diapositivas a las cosas inusuales que los prisioneros construyeron para sí mismos.

Foto: Runrun.es vía BBC

Sí, has leído bien, un zoológico, con un jaguar, flamencos y algunos otros animales exóticos. Los reclusos debían ser amantes de los animales.

Imagen: Zuoqi Liu / Unsplash

¿Bueno, por qué no? Teniendo en cuenta que en Venezuela es verano casi los 365 días del año, una piscina viene bien en cualquier lugar.

Foto: @AlertaMundial2 / Twitter

Los reclusos tenían acceso a restaurantes con terraza para disfrutar de sus comidas al aire libre. También podrían conseguir su comida para llevar, aunque puede resultar difícil para nosotros, personas ingenuas, imaginar adónde irían realmente.

Esto puede darle una idea de la movilidad en la penitenciaría de Tocorón. Dentro de la prisión existían pequeñas aldeas o barrios donde personas que no eran reclusas podían convivir con los reclusos. Una mujer llamada Gladys Hernández dijo a la AFP: "Yo vivía allí, pero nos echaron (las autoridades)".

Con una superficie de 116 hectáreas (286 acres), ¿quién querría pasar su tiempo caminando por el complejo penitenciario? Es lógico que los reclusos necesitaran un concesionario de motocicletas para conseguir los últimas modelos y desplazarse.

Dado que las familias se instalaban en el centro penitenciario sin ser condenadas por ningún delito, era común que los niños corrieran y jugaran. Naturalmente, la prisión necesitaba un patio de recreo para ellos, ¿no?

Foto: @AlertaMundial2 / Twitter

La tecnología financiera no podía faltar en el Centro Penitenciario de Tocorón. Como verdaderos empresarios de criptomonedas, los reclusos tenían computadoras que minaban Bitcoin para ellos.

La seguridad en una prisión siempre debe ser una prioridad, especialmente cuando hay motocicletas costosas y operaciones de minería de Bitcoin en las cercanías. La cuestión es que las armas normalmente deberían estar en manos de las autoridades y no de los prisioneros.

Muy al estilo de 'The Shawshank Redemption', los prisioneros tenían un túnel de unos 5 kilómetros (3 millas) que conducía al mundo exterior.

A diferencia de la mayoría de los prisioneros, los reclusos de Tocoron iban y venían por el túnel. Tomarían café, irían de compras o visitarían la playa. Al final, la vida siempre era mejor por dentro que por fuera, por lo que los prisioneros regresaban casi siempre.

Imagen: Policía Nacional de Venezuela

Cuando los venezolanos hablan de Tokio, normalmente no se refieren a la capital japonesa. 'Tokio' es un famoso club nocturno que atrae a DJ's internacionales y cuenta con las instalaciones de luces de neón, fiestas temáticas, bebidas y drogas más avanzadas. ¿Donde está localizado? ¡Dentro del Centro Penitenciario de Tocorón, por supuesto!

Foto: Runrun.es

Para poder consumir en los diferentes restaurantes, tiendas, la discoteca y el concesionario de motos, los internos necesitan dinero en efectivo. Entonces lo más lógico y sensato es tener cajeros automáticos en la cárcel.

Foto: Eduardo Soares / Unsplash

El béisbol es uno de los deportes favoritos de los venezolanos, por lo que el Centro Penitenciario de Tocorón no estaría completo sin su propio estadio de béisbol. Según El Nacional, el campo deportivo está completamente equipado e incluso en mejor estado que muchos de los estadios venezolanos del 'afuera'.

Foto: @AlertaMundial2 / Twitter

Según 2001online, algunos reclusos afirmaron que había centros de juego, licorerías y carnicerías. Los periodistas no llegaron a verlos, pero considerando lo que sí confirmaron, todo es posible en Tocorón.

Foto: Runrun.es

Un individuo que prefirió mantener el anonimato dijo a Runruns.es que en la prisión había 'bancos', regentados por jefes de bandas. Estaban destinados a que la población pagara lo que las pandillas llaman 'La Causa'.

Foto: Eduardo Soares / Unsplash

'La Causa' es la cantidad de dinero que pagan los presos para mantenerse a salvo de cualquier daño. La administración del dinero y los asuntos penitenciarios está en manos de la banda del 'Tren de Aragua'.

También podrías utilizar el banco para comprar 'beneficios' como colchones o conseguir celdas con más privacidad. ¡Como en un hotel!

Imagen: 'Prison Break' / FOX, Getty

Héctor Rusthenford Guerrero Flores, alias 'El Niño Guerrero', es el jefe de la banda Aragua. El sindicato es tan extenso que llega incluso a otros países de América del Sur como Bolivia, Colombia, Brasil, Ecuador, Chile y Perú.

Imagen: foto policial publicada por las autoridades venezolanas.

Según el diario El Nacional, El Niño Guerrero ganó aproximadamente 3 millones de dólares al año mientras estuvo en la Penitenciaría de Tocorón.

Actualmente, el joven se encuentra prófugo, pues su prisión ya no es suya. Es una lástima, porque tal vez, en otra vida, podría haber aparecido en la lista de personas ricas de Forbes.

Imagen: @MijpVzla / Twitter