Oh là là! Escándalos en la inauguración de los Juegos Olímpicos de París

Fue inolvidable: la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Verano de París 2024. No sólo porque se celebró en el centro de París, a lo largo de las orillas y puentes del río Sena, sino también por el tipo de entretenimiento que los organizadores franceses eligieron presentar.

Imagen: Juegos Olímpicos / X

Lady Gaga fue una de las superestrellas que cantó en la ceremonia. La conocemos por iluminar eventos de todo tipo, desde partidos de futbol hasta inauguraciones presidenciales y fiestas gay. Todo fue posible cuando ella gritó: "¡Buenas noches! ¡Bienvenidos a París!".

Por eso, cuando apareció a orillas del río Sena con un ajustado traje de cabaret y una obra de teatro con plumas rosas, cantando "Mon Truc en Plumes", nadie se sorprendió. La extravagancia francesa y el entretenimiento global se unen.

Sin embargo, las cosas pronto se calentaron en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París. Las plumas estaban erizadas, literal y figuradamente.

En el Palacio de Justicia, vimos la primera imagen que conmocionó a muchos espectadores de todo el mundo: María Antonieta de pie, erguida y con su propia cabeza en brazos tras su histórico encuentro con la guillotina. La última reina antes de la Revolución fue decapitada en 1793.

Los gemelos del Príncipe Alberto y la Princesa Charlène de Mónaco expresaron su sorpresa y asombro al ver la inusual ceremonia de apertura. Según Fox News, algunos encontraron "despreciable" la apariencia de María Antonieta, mientras que otros pensaron que merecía la primera medalla de oro de los Juegos.

En otra escena muy debatida, tres actores coquetearon entre sí en lo que pareció convertirse en un 'ménage à trois' o al menos una historia de amor no convencional. Como destacó el relato de los Juegos Olímpicos X, "la libertad de amar no es menos sagrada que la libertad de pensar": pura sabiduría de Victor Hugo.

Imagen: Juegos Olímpicos / X

Los espectadores citados por Fox News reaccionaron con "una mezcla de hilaridad y negatividad". En USA Today, la respuesta fue en general positiva, pero "eso no hizo que fuera menos impactante presenciarlo en la cadena de televisión a media tarde".

Imagen: vlucas / X, vía Fox News

Más tarde, después de las llamativas apariciones de Los Miserables, la Mona Lisa e incluso los Minions, apareció otra escena en el Sena que a muchos les resultó difícil de ver.

Un grupo de artistas dr*g representó una famosa escena religiosa, pero ¿cuál era? ¿La Última Cena de Cristo, o una bacanal dionisíaca de la antigua cultura griega?

Imagen: Juegos Olímpicos / X

La mayoría de los espectadores vieron la representación de Da Vinci de Jesús y sus apóstoles en la escena y algunos denunciaron a los organizadores de la ceremonia de apertura. Entre ellos, presentadores de televisión conservadores como Piers Morgan.

Imagen: Piers Morgan / X

La Iglesia católica francesa fue especialmente vocal, informó Reuters. Un portavoz incluso afirmó que "algunos atletas franceses tuvieron problemas para dormir debido a las consecuencias de la polémica", según cita la agencia de noticias.

En el momento de la polémica exhibición, los organizadores de los Juegos Olímpicos estaban listos para explicar lo que estábamos viendo:
"La interpretación del dios griego Dioniso nos hace tomar conciencia del absurdo de la violencia entre seres humanos".
Un mensaje noble, pero ¿alguien lo habría adivinado?

Imagen: Juegos Olímpicos / X

Quizás la gente se confundió al ver a los artistas en la mesa. O tal vez realmente fue la Última Cena y posteriormente se convirtió en una bacanal griega. Ambas opciones son posibles y el debate continúa.

En cualquier caso, a la mañana siguiente, los organizadores de la ceremonia de apertura se disculparon por el "cuadro kitsch", informó Reuters. "Si la gente se ha sentido ofendida, lo sentimos mucho", citó Reuters a la portavoz de París 2024, Anne Descamps.

"Claramente nunca hubo la intención de faltarle el respeto a ningún grupo religioso", dijo Deschamps. La ceremonia "trató de celebrar la tolerancia comunitaria".

Al igual que la amazona que cruzó el Sena al galope al final de la ceremonia, los organizadores quisieron presentar "una representación del espíritu olímpico y un llamado a la paz y la solidaridad". Esperemos que los propios Juegos apaciguen pronto a los críticos.