Qué ha sido de Chiqui Martí, la bailarina erótica de 'Crónicas Marcianas'
Destacar en 'Crónicas Marcianas', donde estaban los colaboradores más potentes de la televisión de principios de siglo, era casi imposible. Menos para Chiqui Martí.
La bailarina hizo del pole dance un arte y cada vez que aparecía en el programa de Xavier Sardá, España entera se paraba y miraba con la boca abierta. Sus subidas y bajadas por la barra de metal iban mucho más allá de lo erótico, lo que hacía Chiqui Martí era arte, con una barra eterna de por medio.
Por aquel entonces, Chiqui Martí era una de las mujeres más deseadas del país y su teléfono no paraba de sonar. Le llovían las ofertas y ella lo argumentaba de la forma más sencilla en LOC: "Dime alguien que estuviera antes que yo bailando así en la tele". Toda la razón.
Y es que Chiqui Martí fue una pionera que abrió puertas, mentalidades y, sobre todo, sus piernas. Su potencia física sólo era comparable a su talento sobre la barra.
Pero llegó junio de 2004 y todo se truncó. Chiqui Martí estaba actuando en la discoteca Radical de Torrijos, haciendo un espectáculo de telas acrobáticas cuando una de sus manos no agarró bien la tela y cayó de una altura superior a cuatro metros. Esa caída truncó su carrera.
No sólo su carrera, pudo ser incluso peor. La bailarina recordaba que al caer, no podía moverla las manos, ni tampoco notaba las piernas. El diagnóstico es de los que asustan, incluso sin saber lo que significa: tetraparesia.
La tetraparesia es similar a la tetraplejia pero menos grave. De hecho, esa fue la diferencia para Chiqui Martí, quien pudo recuperarse tras más de año y medio de durísima rehabilitación.
Con su principal trabajo pausado, mientras seguía recuperándose, Chiqui Martí demostró que es toda una todoterreno. Pasó por 'Supervivientes' en 2007, aunque fue la primera expulsada, en una edición que acabaría ganando Nilo Manrique. También estuvo en 'El Reencuentro', en 2011, donde fue expulsada disciplinariamente.
Viendo que los realities no terminaban de funcionar, optó por emprender con una firma de lencería subida de tono. Eran prendas que ella misma diseñaba.
Ahora, si hay un negocio que le ha funcionado, ha sido su propia academia de baile: Strip-Art Studio. Un espacio en el que enseñan, no sólo a bailar, sino a que muchas mujeres se sientan cómodas y deseadas cuando bailan para alguien.
"Habrá mucha gente que piense que ya no bailo porque no me ven en la tele, pensarán que estoy parada o retirada", comentaba a LOC, donde descartaba una vuelta a la televisión. "Se han perdido los valores. Antes había espacio para los artistas y estaban valorados y remunerados pero ahora no".
¿Y en el amor? En 2011, Chiqui Martí se divorció de su marido. Lo que no esperaba era que su futuro iba a estar al lado de una mujer. "Jamás me he considerado lesbiana,. Ni ahora, Me gustaba los hombres hasta que conocí a Raquel. Ahora se me hace difícil pensar en volver a estar con un hombre".
Así, Chiqui y Raquel se casaron en 2014 y la bailarina lo tiene claro: "Quiero envejecer al lado de Raquel", aseguraba por aquel entonces. Mientras esa vejez llega, Chiqui Martí se esmera en que le pille en la mejor forma posible y, a ser posible dando clase a sus alumnas del Strip-Art Studio.