La transformación de Renée Zellweger

Ahí está Renée Zellweger a finales de los años 90 y sonriendo ante la cámara. Años pasados de una fabulosa actriz que ha cambiado con el paso del tiempo. Repasemos aquí su trayectoria vital y profesional.

Conocida como Zelly, la actriz nacía el 25 de abril de 1969 en Katy, una pequeña localidad situada en la periferia de Houston, Texas (Estados Unidos)

Su padre era un ingeniero suizo, Emil Zellweger; su madre, una enfermera noruega, Kjellfrid Zellweger. Es decir, no había tradición actoral en su familia pero Renée Zellweger intervino en algunos montajes teatrales de su instituto y ahí descubrió su vocación.

Convencida de querer ser actriz, Renée Zellweger cambia su pequeña localidad natal por Austin, donde comienza sus estudios de Arte Dramático en la Universidad de Texas. Tenía 18 años.

Renée Zellweger se graduó en 1991 y comenzó a buscar trabajo en la industria. Eso sí, antes de dar el salto a Hollywood, optó por quedarse cerca de Houston, donde trabajaba de camarera.

El primer papel más o menos relevante de Renée Zellweger fue el de Tami en 'Reality Bites', película en la que compartió cartel con Ben Stiller, Winona Ryder, Ethan Hawke o Steve Zhan. No era (ni de lejos) protagonista.

En sus inicios hizo apariciones puntuales en series como 'Matrimonio con hijos' y compartió protagonismo con un joven Matthew McConaughey en 'The Texas Chainsaw Massacre: The Next Generation'.

En 'Empire Records' dio vida a la deshinibida Gina, la mejor amiga y compañera de Liv Tyler. Un papel que ayudó a Renée Zellweger a dar a conocer su nombre en Hollywood.

(Foto: escena de'Empire Records' con, a la izquierda, Liv Tyler; derecha, Renée Zellweger)

Su primer papel protagonista llegó en 1996, con 'El que caminaba solo', donde dio vida a la escritora Novelyn Pryce. Su interés romántico era Vincent D'Onofrio, quien se metió en la piel de Robert E. Howard

Y llegó Jerry Maguire. Cameron Crowe le dio el papel de Dorothy y su química con Tom Cruise hizo el resto. La película fue nominada a 5 Oscar, entre ellos Mejor Película, y es considerada una de las mejores comedias románticas de los 90. Renée Zellweger ya era toda una estrella. Tenía 27 años.

Tras el éxito de 'Jerry Maguire', la actriz optó por un thriller policiaco que pasó sin pena ni gloria por las taquillas de medio mundo.

Meryl Streep y William Hurt se convirtieron en los padres de Renée Zellweger en 'Cosas que importan'. En esta película daba vida a Ellen, una ambiciosa periodista que deja su amado Nuea York para volver a su pequeña localidad natal, para ayudar a sus padres.

Otro papel protagonista para Renée Zellweger, por encima de intépretes como Christopher Ecclestone o Julianna Margulies.

La actriz despidió el siglo XX con otra comedia romántica. En 'El soltero' tuvo a Chris O'Donnell como pareja protagonista. Curiosamente, el actor ya empezaba su declive, mientras que Renée Zellweger no paraba de subir.

Betty Sizemore le dio a Renée Zellweger el salto de calidad definitivo. Esta enfermera dulce, trabajadora y algo demente le valió su primer Globo de Oro y el reconocimiento como una de las grandes damas de la comedia en Hollywood.

Y claro, si Renée Zellweger era la reina de la comedia, no podía dejar de compartir proyecto con el rey de la comedia: Jim Carrey. El histriónico actor, además, se convirtió en su primera pareja conocida.

Bridget Jones ha sido el gran papel y el de mayor relevancia de Renée Zellweger. No en vano, ha derivado en una trilogía que ha arrasado en taquilla. Su trío amoroso con Colin Firth y Hugh Grant es historia, como también lo es la primera nominación que recibió a Mejor Actriz. Tenía 32 años y tuvo que engordar 18 kilos para meterse en el papel. Kate Winslet rechazó el papel. Ella se lo perdió.

El mismo año que triunfaba como Bridget Jones, Renée Zellweger  estrenó 'La flor del mal'. A pesar de un reparto plagado de estrellas femeninas, como Michelle Pfeiffer o Robin Wright, la película no terminó de funcionar en taquilla.

Renée Zellweger, tras casi una década en la industria, había conseguido entrar en la rueda de los premios con el Globo de Oro. Los siguientes años iban a ser una locura de nominaciones y galardones para ella.

La actriz tuvo que perder el peso ganado para Bridget Jones en tiempo récord, a la par que aprendía a bailar y cantar durante 10 meses. Valió la pena. 'Chicago' arrasó en 2002 y le valió a Renée Zellweger  su segunda nominación al Oscar. Catherine Zeta Jones sí que se lo llevó. Sin duda, uno de los mejores musicales de la historia.

Una nueva comedia de enredo romántica para Renée Zellweger, en este caso, dando vida a una escritora feminista que sugiere a las mujeres de los 60 no perder el tiempo pensando en el amor,y lo dediquen a tener éxito. La química que tiene con Ewan McGregor en pantalla es impresionante.

Y a la tercera fue la vencida. Su tercera nominación llegó de la mano de Anthony Minghella, quien la dirigió brillantemente en el papel de tosca pero leal Ruby. Compartió pantalla con Nicole Kidman y Jude Law, a los que se merendaba en cada plano que compartían.

Tres años después de 'Abajo el Amor', la actriz repetiría con Ewan McGregor. En este caso, Renée Zellweger se mete en la piel de la ilustradora y escritora de libros infantiles Beatrix Potter. Le supuso su sexta nominación al Globo de Oro (ya tenía tres)

Que a Renée Zellweger le gustan las cintas de época, es un hecho. En 'Appaloosa', además, se permite poner en jaque a dos titanes como Ed Harris y Viggo Mortensen. Un Ed Harris que también dirigía la cinta.

Y de Ed Harris a George Clooney. En 2008, la actriz tuvo a estos dos titanes como directores. En 'Leatherheads', se mete en la piel de Lexie Littleton, una periodista con una misión: desenmascarar a Carter Rutherford, un héroe de guerra reconvertido en jugador de fútbol americano, del que sospecha que no merece el estatus de héroe. Un nuevo trío amoroso a sumar al historial de la actriz.

Quizás, la peor película de la carrera de Renée Zellweger La crítica llegó a tildarla de "llena de clichés y sin encanto". ¿El argumento? Una ambiciosa ejecutiva que cambia Miami por Minessota. donde se descubrirá a sí misma y al amor de su vida.

Y volvió el cine de terror. En este caso, de la mano de una trabajadora social que coge el caso de una niña adoptada que es el mal encarnado. La película no pasó de los 28 millones de euros en taquilla. Eso sí, le sirvió para conocer a Bradley Cooper, con quien mantuvo una relación durante dos años.

Ann Deveraux le supuso a Renée Zellweger  convertirse en madre en la gran pantalla. De hecho, a falta de uno, tenía dos hijos, con los que huía por todo el país, tras dejar a su marido infiel. ¿El objetivo de su huida? Encontrar un hombre que les mantenga.

Nuevo aumento de peso, en este caso, para dar vida a una cantante paralítica que, junto a un luchador lesionado, viaja a Memphis con la esperanza de empezar de cero y recuperar sus vidas. Su sintonía con Forrest Whitaker en la película es total.

El reparto original al completo, salvo Hugh Grant, se une en la película que cierra la trilogía Bridget Jones, 15 años después de la primera entrega. La premisa es sencilla: la protagonista está embarazada y el padre puede ser Colin Firth o Patrick Dempsey, quien sustituye en esta cinta a Hugh Grant como segundo galán.

Jon Voigt, Greg Kinnear y Djimon Honsou se unen a Renée Zellweger en este drama extrañísimo que se fue, directo, a las cintas olvidables de la actriz.

El regreso televisivo de Renée Zellweger sorprendió a propios y extraños. Y es que su personaje es la versión femenina de Robert Redford en 'Una Proposición Indecente'. La serie es una más de Netflix y la crítica no ha sido demasiado generosa con ella.

Un biopic es sinónimo de éxito en Hollywood yRenée Zellweger  lo ha conseguido. Verla es ver a Judy Garland y así es como se gana la gloria. Y se llevó el Oscar correspondiente.

En 2022, Renée Zellweger vuelve a probar suerte con una serie: 'The Thing About Pam'. Un proyecto de NBC sobre un crimen real en el que veremos a la actriz en un papel realmente exigente.

Así era y así es Renée Zellweger, una de las mejores actrices de Hollywood. ¡Viva ella!