Todos los detalles (y alguna polémica) de la futura boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva

No es un secreto que la cosa no empezó bien para Tamara Falcó en su decisión de pasar por el altar con Íñigo Onieva a raíz de salir a la luz aquel beso del futuro novio con una joven en el festival Burning Man…

Foto: Atresmedia

Aquello desencadenó la ruptura entre la pareja (dos días después de anunciar su compromiso), pero en enero de 2023 llegó la reconciliación y de momento siguen firmes en su decisión de casarse el próximo 8 de julio.

No obstante, el camino no va a ser precisamente un camino de rosas. Y para muestra lo ocurrido con el que iba a ser su vestido de novia, un diseño a cargo de la firma bilbaína Sophie et Voilà que finalmente no será.

La protagonista de la que promete ser una de las bodas más esperadas de 2023 se ha quedado sin vestido y tendrá que buscar otra alternativa a la que estaban diseñando para ella. ¿El motivo? Un desacuerdo y algún que otro malentendido. O eso parece.

Desde la firma bilbaína Sophie et Voilà anunciaban este martes 16 de mayo, a falta de dos meses para la boda, que el acuerdo con Tamara Falcó se disolvía “como consecuencia del incumplimiento contractual por parte de la señora Falcó”.

“Sentimos un profundo respeto por la creación artística de otros compañeros y nuestra ética empresarial nos impide traspasar ciertos límites que pondrían en peligro la autoría original del diseño. Por eso, y por el respeto que nos merece la originalidad de los trabajos de otras marcas de alta costura, no podemos cumplir con determinadas exigencias de la señora Falcó”, han expresado las responsables de la firma, las diseñadoras Sofía Arribas y Saioa Goitia.

En resumen, Sophie et voilà ha manifestado su negación a realizar el diseño deseado por Tamara al “acercarse demasiado a diseños ajenos a nuestra firma”. Y ¿cuál ha sido la respuesta de Tamara?

La hija de Isabel Preysler y el difunto V marqués de Griñón, Carlos Falcó, desmiente la versión de Sophie et voilà. De hecho, en el programa de La Sexta ‘Más vale tarde’ Tamara Falcó declaró en la tarde del pasado 16 de mayo que todo ha sido muy doloroso y que está todo en manos de sus abogados. Lo que sí manifestó tener claro es que no iba a casarse con un vestido que no era de su gusto.

En cualquier caso, Tamara no tiene duda de que habrá vestido: "Gracias a dios, conozco a un montón de gente dentro del mundo del diseño. No sé quién me lo va a hacer, estoy un poquito apagando fuegos. El vestido aparecerá”, afirmó Tamara en ‘Más vale tarde’.

Foto: Atresmedia

Pero no ha sido el único inconveniente. De hecho, los más supersticiosos podrán creer (y razones no les faltan) que esta boda está gafada.

Y es que la futura esposa de Íñigo Onieva está teniendo “mala pata” entorno a lo relacionado a los preparativos de su inminente enlace matrimonial. De hecho, pocos días antes de su despedida de soltera, que tuvo lugar en Fátima (Portugal) a principios del mes de mayo, la colaboradora de ‘El Hormiguero’ sufrió un esguince.

Otro inconveniente tuvo relación con la fecha de la boda, que en un principio iba a tener lugar el próximo 17 de junio en El Rincón, el palacio familiar que Tamara heredó tras el fallecimiento de su padre, y que finalmente se cambió al 8 de julio.

La razón, tal y como confesó la propia Tamara a diferentes medios, es su intención de que puedan asistir a la fiesta algunos familiares y amigos importantes, como su amiga (y esposa de su primo Alvaro Falcó) Isabelle Junot, que está previsto que dé a luz a su primera hija a mediados de junio de 2023.

En cuanto al lugar de la boda, como decíamos, la intención de Tamara e Íñigo es que tenga lugar en la capilla de El Rincón, aunque no queda claro si la pareja podrá cumplir con sus deseos, ya que a día de hoy no es posible casarse en capillas privadas.

La única forma de remediar este impedimento sería obtener una dispensa del Obispo de la Diócesis de Getafe (que es a la que pertenece El Rincón)… ¿La habrá conseguido Tamara? Quizás, y dada su buena relación con la Iglesia, haya tenido más suerte que con su vestido…

A pesar de las dificultades, hay quien no ha dudado en afirmar que Tamara ha preferido casarse en El Rincón, en detrimento de otras opciones iniciales como la Parroquia de Santa Barbara de Madrid, ya que allí será más fácil controlar una posible exclusiva…

Y por último, otra polémica: la lista de bodas de la pareja, disponible en una página web creada por los novios y en la que se pueden encontrar artículos de todo tipo (como saleros por 25 euros), pero también tarjetas regalo con un importe mínimo de 150 euros, lo que algunos periodistas de la crónica rosa han criticado por ser considerado de mal gusto.

Sea como fuere, Tamara e Íñigo, están convencidos de su amor y quieren casarse, ser felices y comer perdices. ¿Lo conseguirán?

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