¿Qué pasaría si muere el Papa Francisco?
Los últimos achaques de salud del Papa Francisco han hecho saltar todas las alarmas y hay quien se preguntará qué ocurrirá en el caso de que el empeoramiento del Sumo Pontífice derive en un triste desenlace.
"La tomografía computarizada de tórax a la que se sometió esta tarde el Santo Padre, prescrita por el equipo sanitario vaticano y por el equipo médico de la Fundación Policlínico A. Gemelli, demostró la aparición de neumonía bilateral que requiere terapia farmacológica adicional", puede leerse en un comunicado emitido por El Vaticano.
Desde su ingreso hospitalario, en las puertas del Hospital Universitario Gemelli se congregan multitud de personas que rezan por la salud de Jorge Mario Bergoglio (Buenos Aires, Argentina, 1936), quien fuera elegido como el Papa 266 de la iglesia católica en marzo del 2013.
Su elección estuvo marcada de novedades, pues se convirtió en el primero en 1.200 años que no es de origen europeo, el primero en provenir de América, el primer papa jesuita y el primero que eligió el nombre de Francisco (en honor a San Francisco de Asís).
El papado de Francisco ha estado marcado por decisiones que han supuesto toda una revolución en la Iglesia, como sus decisiones adoptadas para la protección de los menores ante los escándalos de abusos o el nuevo enfoque de la Iglesia hacia las personas homosexuales, lo que le han convertido en un papa muy querido.
Aunque los fieles de todo el mundo esperan que se produzca una mejoría, es inevitable pensar ¿qué pasará cuando muera Francisco? ¿Qué protocolo se sigue en El Vaticano cuando fallece un papa?
Además: Preocupación por la salud del Papa: detalles sobre su estado de salud
Desde hace siglos, con el fin de garantizar que se produzca una transición ordenada en el liderazgo de la Iglesia, todo está perfectamente detallado.
Una vez se confirma la muerte de un papa, se abre el protocolo de Sede Vacante, lo que supone que el Camarlengo confirma su fallecimiento.
Según la tradición, la muerte de un papa se confirma golpeando tres veces su frente con un martillo de plata por el Camarlengo mientras se le llama hasta en tres ocasiones por su nombre de bautismo.
El Camarlengo juega un papel crucial una vez se confirma la muerte de un papa. Es a él a quien corresponde, en presencia del resto de cardenales, retirar de su dedo el famoso anillo del Pescador.
En el caso de la muerte del Papa Francisco, la verificación de su muerte tendrá lugar en en la capilla del Palacio Apostólico en lugar de en su dormitorio, como venía siendo habitual. Y es que, con el objetivo de simplificar los rituales, en noviembre de 2024 el propio Papa Francisco aprobó una nueva edición del 'Ordo Exsequiarum Romani Pontificis', protocolo por el que se rige el rito del funeral de un papa,
Los nuevos cambios también implican que, en el caso de la muerte del Papa Francisco, se sustituyen los tres ataúdes clásicos (ciprés, plomo y roble) por uno único de madera con interior de zinc.
Además: ¿Reencarnación o coincidencia? La teoría que une a Mesut Özil y Enzo Ferrari
No habrá el velatorio privado que anteriormente se realizaba en la capilla del Palacio Apostólico, y el cuerpo del pontífice será directamente trasladado a la Basílica De San Pedro, donde será expuesto ante los fieles que quieran darle el último adiós.
Por decisión del papa Francisco, su cuerpo será expuesto con el féretro abierto, sin el uso de un catafalco ni la colocación del báculo papal.
Según puede leerse en el libro de Javier Martínez-Brocal "El sucesor" (Editorial Planeta), el objetivo es que a partir de ahora, el cuerpo de los papas "sean velados y sepultados como cualquier hijo de la Iglesia".
El féretro se cerrará la víspera de la misa exequial y, tras el funeral, será traslado al sepulcro para el entierro.
El papa Francisco ha abierto la puerta a que cada papa elija el lugar en el que quiere ser enterrado. Y, en su caso, siempre ha manifestado que le gustaría que fuese en Santa María la Mayor, detrás de la estatua de la Reina de la Paz, en la habitación donde guardaban los candelabros.
Tras la muerte de un papa, el Camarlengo, que pasa a encabezar la Iglesia Católica mientras la sede está vacante, convoca al cónclave para elegir al sucesor del papa entre los siguientes 15 y 20 días.
En la Capilla Sixtina, los cardenales que tienen menos de 80 años votan hasta alcanzar los dos tercios necesarios.
Una vez elegido el nuevo Papa de la Iglesia, se produce la famosa fumata blanca y el nuevo Santo Padre sale al balcón de la Basílica de San Pedro para su primera bendición Urbi et Orbi, dando inicio a un nuevo papado.