Las cascadas y cataratas más impresionantes del mundo

Las cataratas o cascadas (dependiendo de la altura y del volumen de agua) son regalos de la naturaleza que abruman por su majestuosidad. Verdaderos monumentos naturales que siempre merece la pena visitar. Por ello repasamos en esta galería algunas de las más impresionantes del mundo. Las de la imagen, por cierto, son las cataratas del Iguazú, entre Argentina y Brasil.

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Las impresionantes cascadas Jog, en India, están creadas por el río Sharavathi al precipitarse por una caída de 253 metros de altura. Y son todavía más impresionantes en la temporada del monzón, cuando las lluvias son mucho más torrenciales

En Islandia encontramos la cascada de Seljalandsfoss, que nace de las aguas del río Seljalandsá, que tiene a vez su origen bajo el glaciar Eyjafjallajokull. Parte de su encanto es que se puede caminar por detrás de la cortina de agua.

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Sin duda se trata de una de las cataratas más famosas del mundo, tanto por su belleza como pos sus dimensiones, con 1.708 metros de ancho y 108 de altura. Como curiosidad, su nombre se lo debe a la reina Victoria del Reino Unido, pues fueron descubiertas para Occidente en 1855 por el médicos, misionero y explorador británico David Livingstone.

Otras cataratas muy (muy) famosas son las del Niágara, las más fotografiadas de Norteamérica. Tienen una caída de 51 metros y son además de un atractivo turístico, una gran fuente de energía hidroeléctrica que aprovechan las ciudades colindantes.

Al norte de Vietnam, en la frontera con China, encontramos las bellas cascadas de Ban Gioc-Detian, bañadas por las aguas del río Quay Son. Destacan por su belleza y singularidad, al estar repartidas en distintos niveles. No son muy accesibles, por lo que no están muy concurridas por turistas.

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Con más de 800 metros de caída ininterrumpida, el Salto del Ángel, en Venezuela, enclavado el Parque Nacional de Canaima, es el salto de agua más alto del mundo. Absolutamente impresionante.

Ubicadas en la frontera natural entre el estado brasileño de Paraná y la provincia argentina de Misiones, encontramos las Cataratas del Iguazú, una de las 7 maravillas naturales del mundo. La Garganta del Diablo concentra la mayor cantidad de agua.

Todo lo que rodea a esta cascada islandesa, situada al sur de la isla, es mágico. No sólo por las auroras boreales o constantes arcoíris que allí pueden verse, sino por la leyenda de que el primer colono vikingo en la zona, Þrasi Þórólfsson, guardó un tesoro en una caverna detrás de la cascada.

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Las cataratas Epupa, situadas en el río Cunene, en la frontera entre Angola y Naminia, son un tesoro de la naturaleza, aunque de difícil acceso, por lo que no están muy frecuentadas, lo que ayuda a mantener su encanto.

En el lago portugués de Covão dos Conchos, ubicado en la Serra da Estrela, encontramos esta peculiar cascada circular que en realidad tiene truco, ya que se trata de una creación humana que tiene como finalidad recoger las aguas del lago y conducirlas hasta la ciudad de Lagoa mediante un entramado de túneles.

Las aguas de las cataratas de Dudhsagar, situadas en el estado indio de Goa, nutren la vegetación del Parque Nacional Mollem, lo que aumenta su belleza por el marco incomparable. Son además unas de las más altas de India, con más de 300 metros de altura.

Si viajamos hasta Croacia no podemos pasar por alto las cascadas de Plitviče, en el Parque Nacional de los Lagos de Plitviče. Se trata de 16 lagos en terrazas conectados por distintas cascadas que destacan tanto por la vegetación que las rodea como por el tono azul de sus aguas.

En el estado de Oregón (Estados Unidos), encontramos las Cataratas de Multnomah, de cuyas vistas se puede disfrutar desde el precioso puente Benson.

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En Guyana, en mitad de la selva amazónica, están las cataratas Kaieteur, que tienen una altura de 226 metros. Se trata de la cascada de una sola caída más grande por volumen de agua.

Muy instagrameables por el color azul turquesa de sus aguas y su disposición, en distintos niveles, son las cataratas Kuang Si, situadas en el Sudeste Asiático, concretamente en Laos.

Especialmente singulares son las cataratas del Rin, . Y no por su altura, sino por encontrarse muy cercanas a que la ciudad de Schaffhausen (Suiza). Con 150 metros de ancho, son el mayor salto de agua en Europa Central.

La cascada más alta de Europa está en Noruega, en el municipio de Sunndal, con 865 metros de altura. Se alimenta de las aguas del glaciar Vinnufonna encontrado en un pico de 1.814 metros de altitud.

En la frontera entre Álava y Burgos se esconde la cascada más alta de España, con 270 metros de altura. Por ella caen las aguas de los arroyos Ajiturri, Iturrigutxi y Urita, regalando una imagen única.

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