'Space out Competition': la competición en la que hay que ser bueno sin hacer nada
En Italia se habla a menudo de "Dolce far niente", es decir, un estado de ocio feliz y despreocupado que aporta paz y bienestar a quien lo experimenta. Este estado parece desconocido en muchos otros países, como Corea del Sur, donde el ritmo de trabajo es agotador. En 2018 incluso se fijó un límite de 52 horas de trabajo semanales y en 2023 se descartó una propuesta que lo habría llevado a 69.
Para hacer frente a esta situación, la inventiva y la creatividad, probablemente también combinadas con mucho cansancio, han dado lugar a un concurso verdaderamente único: el "Space out Competition". ¿De qué se trata? Te lo explicamos enseguida.
Las reglas son simples: el objetivo es no hacer absolutamente nada. Los organizadores controlan la frecuencia cardíaca de los participantes. Gana quien tenga los latidos más estables. Y no, no merece la pena quedarse dormido.
La última competición se celebró el 12 de mayo de 2024 en el centro de la ciudad de Seúl, donde decenas de personas de todas las edades se reunieron para competir.
Muchos se presentaron con ropa de trabajo: había médicos, dentistas, abogados, oficinistas y muchos estudiantes. Casi todos con las inseparables y fundamentales esterillas de yoga.
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La mayoría se sentó en posición meditativa con la mirada perdida, independientemente de la lluvia que acompañó la competición en determinados momentos del día.
La ganadora del concurso fue Valentina Vilches, una consultora de psicología chilena radicada en Corea del Sur, quien luego declaró que participó no solo para divertirse, sino también para compartir esta experiencia con sus pacientes.
“Quiero recordarles la importancia de alejarse y relajarse y cómo esto afecta positivamente a la salud mental”, dijo tras recibir su trofeo, según informó The Guardian.
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La competición ya se ha celebrado en ciudades como Tokio, Taipei, Beijing y Rotterdam. Este año los participantes procedían tanto de Corea del Sur como del extranjero: hubo participantes de Francia, Nepal, Sudáfrica, Vietnam y Malasia, por ejemplo.
The Guardian también entrevistó a otro participante, Kim Ki-kyung, que casi llegó tarde debido a que se vio obligado a trabajar el domingo por la mañana: "La sociedad coreana es muy competitiva, por lo que a veces no hacer nada es esencial. Creo que hemos olvidado cómo hacerlo". , concluyó el niño.