Stacey Plaskett, la mujer que acusa a Trump

En el juicio político contra Trump que se sigue en el Congreso estadounidense ha sonado con fuerza la voz de una mujer. Ella es la demócarta Stacey Plaskett, que ejerce como "impeachment manager" (una especie de fiscal). Su relato ha sido contundente a la hora de vincular a Trump con la violencia ejercida en el Capitolio. Pero ¿quién es realmente esta mujer? ¿De donde procede? ¿Y por qué, ejerciendo el papel que ejerce, no votará contra Trump?

Nació en Nueva York, a donde sus padres emigraron desde las Islas Vírgenes. Su padre era policía y su madre, funcionaria judicial. Vivió en un barrio pobre de Brooklyn. Y muy a menudo regresaba con su familia a las Islas Vírgenes, territorio caribeño no incorporado oficialmente a Estados Unidos pese a que sus habitantes son considerados estadounidenses (aunque con algunas limitaciones electorales).

Stacey Plaskett ha vivido una auténtica historia de superación. Asistió en Brooklyn a escuelas religiosas y destacó hasta el punto de que la organización A Better Chance Inc. (que ayuda a estudiantes de minorías raciales a acceder a escuelas y universidades de alto rendimiento) la seleccionó y, así, acudió al Choate Rosemary Hall, internado femenino en el que practicó atletimos y se preparó para la escuela de leyes.

Fue una brillante alumna de leyes, licenciada por la prestigiosa universidad de Georgetown. y en el impeachment su compañero de partido, Jamie Raskin (que fue su profesor), quiso dejar clara la competencia de Stacey Plaskett como jurista: "era una estudiante de primera entonces y sigue siendo de primera ahora" ("an 'A' student then and she is an 'A+' student now").

Stacey Plaskett trabajó como ayundante del Fiscal en el distrito del Bronx y sacó adelante numerosos casos, destacando en la pelea contra el tráfico de sustancias tóxicas. Pero la política era algo que le atraía. O, más bien, la gestión de lo público. O quizá el poder. Sea como sea, Stacey Plaskett comenzó a trabajar en importantes puestos en el área de justicia para el gobierno de George W. Bush. En aquellos días Stacey Plaskett se movía en el entorno del Partido Republicano y todo hacía suponer que su carrera política se desarrollaría en ese lado.

Pero en 2008 Stacey Plaskett se incorpora al Partido Demócrata. ¿Qué hubiera sido de su carrera de haberse quedado en las filas republicanas? Nadie puede saberlo pero lo cierto es que con Trump se ha consumado una etapa en la que no ha sido fácil que se repitiera la pujanza de figuras de la comunidad afroamericana dentro del Partido Republicano, como sucedió con Condoleezza Rice o Colin Powell. Su progresión política tenía más sentido en el Partido Demócrata (al menos, visto desde la actualidad). Desde 2012 es representante de Islas Vírgenes.

Stacey Plaskett tiene cinco hijos y está casada con Jonathan Buckney Small, un antiguo jugador de tenis profesional. Fue madre de sus dos primeros hijos muy joven, mientras todavía estudiaba leyes en Georgetown.

Como otras compañeras y compañeros, Stacey Plaskett tuvo que esconderse durante el asalto al Capitolio y su vida pudo correr peligro. Esa es una de las ideas centrales de la acusación en este impeachment: si hubieran podido, los asaltantes (sostienen los demócratas) habrían matado a gente como Stacey Plaskett o Nancy Pelosi. Su integridad física no estuvo garantizada, eso es seguro, y Stacey Plaskett defiende que Trump fue el culpable, que incitó a la violencia.

La elección de Stacey Plaskett para ejercer la acusación a Trump por parte del Partido Demócrata tiene un significado. Se trata de una jurista sólida y de una persona de ideología moderada, que incluso estuvo en el Partido Republicano. Todo ello pretende hacer ver a la opinión pública que este impeachment no es un juicio político con afán vengativo sino que hay base jurídica para que Trump sea condenado e inhabilitado.

En Stacey Plaskett y otros representantes demócratas se ha dejado el papel de acusación contra Trump. Joe Biden, en este asunto, ha decidido mantenerse al margen, mostrar una neutralidad institucional que contrasta con el ruido permanente que generaba a través de Twitter el anterior inquilino de la Casa Blanca.

Sin embargo, hay una curiosidad con respecto a Stacey Plaskett: no podrá participar en la votación del impeachment contra Trump porque es congresista por Islas Vírgenes, cuyos representantes tienen limitado su voto en asuntos del Capitolio. No podrá votar pero su voz se escucha firme acusando a Trump de incitar a la rebelión de sus huestes más radicales.